Fuente de agua
Oráculo de agua de la antigüedad - Tazón Tao - mágico
Los tazones de agua se frotan con las manos humedecidas en las asas desnudas y doradas. Con un poco de habilidad, al cabo de un rato el cuenco empieza a vibrar lentamente. Esta vibración se produce principalmente en el punto en el que se encuentra la superficie del agua y, por lo tanto, el agua se pone a temblar. Este temblor y esta vibración comienzan suavemente, se vuelven más potentes, ondulan la superficie del agua, hacen olas al principio.... y más tarde un burbujeo que puede salpicar hasta la cara.
- Diámetro: 39 cm
- Material: metal
- Color: verde/turquesa
La leyenda dice que los cuencos se utilizaban para lavar la cara del emperador chino, que no podía tocar nada. Un lacayo se encargó de hacer burbujear el cuenco y el emperador sostuvo su rostro sobre él. Otra leyenda habla del uso de los cuencos para consultar el oráculo del agua.
El cuenco que burbujea el agua tiene un sonido bastante profundo, apenas audible, y puede burbujear con fuerza. Vendemos el cuenco con una estera de goma para que responda mejor al frotarlo.
Consejos:Ayuda a no quererlo. Cuanto más tensos seamos, menos probable será que funcione. Lávate previamente las manos con jabón, luego enjuágate bien las manos y frota las asas hacia delante y hacia atrás con las palmas húmedas. Por experiencia, los niños pueden hacerlo mejor que los adultos al principio.
Oráculo de agua de la antigüedad - Tazón Tao - mágico
Los tazones de agua se frotan con las manos humedecidas en las asas desnudas y doradas. Con un poco de habilidad, al cabo de un rato el cuenco empieza a vibrar lentamente. Esta vibración se produce principalmente en el punto en el que se encuentra la superficie del agua y, por lo tanto, el agua se pone a temblar. Este temblor y esta vibración comienzan suavemente, se vuelven más potentes, ondulan la superficie del agua, hacen olas al principio.... y más tarde un burbujeo que puede salpicar hasta la cara.
- Diámetro: 39 cm
- Material: metal
- Color: verde/turquesa
La leyenda dice que los cuencos se utilizaban para lavar la cara del emperador chino, que no podía tocar nada. Un lacayo se encargó de hacer burbujear el cuenco y el emperador sostuvo su rostro sobre él. Otra leyenda habla del uso de los cuencos para consultar el oráculo del agua.
El cuenco que burbujea el agua tiene un sonido bastante profundo, apenas audible, y puede burbujear con fuerza. Vendemos el cuenco con una estera de goma para que responda mejor al frotarlo.
Consejos:Ayuda a no quererlo. Cuanto más tensos seamos, menos probable será que funcione. Lávate previamente las manos con jabón, luego enjuágate bien las manos y frota las asas hacia delante y hacia atrás con las palmas húmedas. Por experiencia, los niños pueden hacerlo mejor que los adultos al principio.